Por ayudar a papá...[Serena y Dan]

No sabía bien que hacía allí, ni siquiera por qué me había dejado convencer, pero el hecho es que me había dejado enredar por Jenny y papá para ayudar a éste último esa nevada tarde de invierno con la galería. Pese a que por culpa de ello había tenido que cancelar mis planes con Vanessa (no muy entretenidos, ayudarla a grabar un reportaje de la ciudad nevada) no estaba de mal humor, es más, presentía que esa tarde iba a pasar algo bueno, no sabía el qué, pero algo pasaría...

Paseaba algo aburrido por los distintos pasillos, no entraba alguien desde hacía aproximadamente veinte minutos atrás, y el libro que me había traído para leer no me interesaba esa tarde. Estaba absorto en mis pensamientos cuando escuché el ruido de la puerta al abrirse, y me acerqué allí casi corriendo. No podía ver de quién se trataba, así que lancé mis palabras al aire:
-¿Hola?

Aquel dia era especial, por fin habia nevado, yo estaba contenta, fui a visitar a Eric, donde tuvimos una entretenida charla, hasta que aparecio mi madre, volvimos a discutir sobre el tema de sacar a Eric de aquel lugar, pero mi madre se seguia negando. Despues volvimos a la normalidad dentro de lo que cabía. Estaba cansada de estar alli, con ella, hasta que empezo a hablar sobre como decorar la suite. Al parecer queria poner algunos que otros cuadros para decorar las paredes, las veia tan vacias, asique yo sin dudarlo ni un momento, la dije que yo me encargaria de eso.

Desde el movil busque alguna galeria de arte que estuviese cerca, y que le pudiese gustar a mi madre, consegui localizar una en Brooklyn, asique me dirigi hacia alli. El cuello del abrigo que llevaba me tapaba mas de media cara, y el aire alboroto mi cabello, pero consegui encontrar el picaporte de la puerta. Cuando entre me coloque como pude el pelo, en ese momento alguien se acerco a la puerta.
-Hola-dije con una sonrisa mientras me acababa de colocar el pelo.

Me quedé literalmente clavado a ese punto del suelo cuando por fin vi de quién se trataba. No podía creerlo, Serena Van Der Woodsen, mi amor platónico desde siempre y ahora compañera de colegio estaba aquí, en la galería de mi padre, debía ser una broma, y desde luego, una broma de dudoso gusto. Podría decir que estuve una eternidad en esa posición, porque mis músculos no parecían dispuestos a responder a mis órdenes. Me empezaron a sudar las manos y en ese momento supe que si empezaba a hablar ahora, sería difícil pararme, como cada vez que me ponía nervioso. Pero no podía estar callado tanto tiempo, ella pensaría que era tonto, así que hice un esfuerzo hercúleo por parecer tranquilo.
-Vaya...¿como una East Sider por aquí? -En realidad queria preguntar "¿Qué es eso tan maravilloso que he hecho para que tú vengas por aquí?"- Si estás interesada en algún cuadro siento decirte que mi padre no está...pero vamos, que yo puedo ayudarte, si quieres, claro, no pretendo molestar...-Mi voz interior me decía "Cállate Dan, cállate", pero yo no podía parar de hablar, y eso a veces me traía problemas, cómo presentía que iba a pasar ahora- Bueno, que mejor voy a seguir con lo mío y tu mira por aquí si te gusta algo...-concluí ya girándome dispuesto a finalizar mi primera y última conversación con ella.

Vi que aquel chico se ponia un poco nervioso, y aunque no sabía porque mantuve mi sonrisa para que se tranquilizase. Despues me hizo una pregunta que me dejo sorprendida,¿Cómo sabia que era del Upper East Side? bueno, aunque todo el mundo lo sabia, no era por ser egocentrica ni tirarme flores, pero mi vida no era muy privada que se dijese.-Bueno, pues resulta que la familia Van Der Woodsen se ha mudado-la verdad es que cambiabamos de casa cada poco tiempo, solo porque mi madre no estaba deacuerdo con algo, esta vez habia sido por el color de las paredes-ahora vivimos en el Palace, y mi madre ha decidido decorar la suite un poco, y antes de que haga algo en mi habitación prefiero hacerlo yo-dije con una sonrisa mientras ponia los ojos en blanco, mi madre y yo eramos muy distintas… Despues explico que el dueño de la galeria era su padre, por lo que comprendi su nerviosismo-Tranquilo, bueno, yo la verdad es que yo no entiendo mucho de arte y necesitaba ayuda de un experto-dije mientras miraba un cuadro, al decir esto ultimo me gire hacia el dedicandole una sonrisa-¿Qué me dices?¿eres un experto en arte?-de repente mi movil sono, era un mensaje de Eric. Lo lei con una sonrisa y se lo conteste rapidamente… Luego volvi a levantar la vista hacia el chico-por cierto ya que me vas a ayudar deberia de saber tu nombre--dije con una sonrisa-aunque he de admitir que me resultas familiar¿nos hemos visto algunavez?-pregunte mientras hacia memoria.